domingo, 12 de febrero de 2012

La traición de Nippy


Hola Nippy, igual no te acuerdas de mí, estuve en el concierto de Las Ventas del 88.
Ya sé que ha sido un accidente, te levantaste con resaca, te querías dar un baño, tus tranquilizantes, quizá un poco más de alcohol ... No, no ha sido un suicidio. ¿O sí? Igual es un suicidio abandonarte como tú te abandonaste. Sí, puedes decir que era tu vida, que podías hacer con ella lo que querías... No sé, yo creo que estar vivo conlleva una responsabilidad, seguir vivo. Primero, por uno mismo y luego por los que te rodean. ¿No es un poco cruel que tengan que vivir para siempre pensando que no hicieron lo suficiente para impedir tu muerte?  
Dejándote morir Nippy, nos has traicionado a todos. Pensarás que el mundo sigue girando, que continuemos con nuestras vidas. Sí Nippy, continuaremos con nuestras vidas, pero nos faltas tú, y nos vas a faltar para siempre.
Un beso.

domingo, 5 de febrero de 2012

Restos del Incendio

El martes se incendió la oficina de al lado a la mía. Fue por la noche, no había nadie trabajando. Por lo visto fue un incendio espectacular, los cristales reventaron, las llamaradas salían por las ventanas... En nuestra oficina no se pudo trabajar los dos días siguientes por todo el humo y la ceniza que había entrado. Muchos no pudimos evitar el morbo de asomarnos a la oficina siniestrada. Es increíble ver las mesas quemadas con restos de carpetas, informes, libros, cuadernos...
Tres días después el equipo de limpieza seguía llenando contenedores con los restos de la oficina.